Día 14 de Julio 2016
22 horas
Teatro Arbolé
12 € (Bonificada 10 €)
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Público joven y adulto
75 minutos
Qué te gustaría ser si no fueses tú? ¿Por qué mola más decir Alabama que Álava? Que alguien me lo explique. Llopis puede.
Llopis se siente muy americano. Le gustan las hamburguesas al igual que las personas, poco hechas…
«Llopis» es la historia de uno que quiso ser alguien. Todos pensamos en algún momento de nuestra vida que nos gustaría ser otro si pudiéramos volver a empezar de cero. Llopis vio ET y quiso ser Elliot. Vio Top Gun y quiso ser piloto. Llopis no quiere dejar de ser del montón, pero él prefiere ser de los de la parte de arriba del montón. De los que sin dejar de ser del montón aprietan al resto. Comedia ácida sobre la invisibilidad humana, sobre el falso éxito americano traído a una España sin raíz, sobre la hamburguesa poco hecha y la horchata demasiado amarga. Llopis es un hombre solitario, o un cowboy de polígono, que se cruza todo los días ante nuestras narices. Lo vemos arrastrando sus botas y dejando un surco que acaba siendo una trinchera. Hasta lo saludamos. Y esta Llopisiana soledad se traslada al escenario. Un sólo actor. No hay técnicos, no hay músicos, no hay nadie más que Llopis/Giménez accionando su mundo. Un universo minúsculo de luces caseras, cámaras domésticas, comida rápida, planetas lejanos, banjos y una fabulosa historia que contar, la de este llanero solitario que es Llopis.
Qué te gustaría ser si no fueses tú? ¿Por qué mola más decir Alabama que Álava? Que alguien me lo explique. Llopis puede.
Llopis se siente muy americano. Americano del norte. De los buenos. Come hamburguesas. Le gustan las hamburguesas al igual que las personas, poco hechas. Llopis vive la vida de otros. O vive la suya siendo otro. El cine, la publicidad, el falso sueño americano y el tragar basura desde la infancia han convertido a Llopis en un ser que dobla esquinas, que respira como puede, que late al compás del vacío, que trepa en ese montón de los que son del montón. Un personaje aislado rodeado de ciudades aisladas, de vidas aisladas. Alguien que sueña con dejar este planeta en el que ahora está de paso. Llopis es el hombre lobo valenciano. Una luna enigmática y un apellido de tintes licántropos. Para Llopis, las ciudades huelen a yugular. Para Llopis los parkings son para aprender a conducir cuando están vacíos. Llopis es la historia de uno que quiso ser alguien.
La Teta Calva nace a partir de un texto de la dramaturga Iaia Cárdenas sobre el cáncer. Una obra no estrenada que narra la experiencia de la autora en una travesía por esta enfermedad. Un obra cargada de ironía y humor negro. Llena de rabia, dolor y humor. Esta obra nos dio pie a entrar como productores en el teatro a pesar de que tanto Xavo Giménez como Iaia Cárdenas ya llevábamos más de veinte años profesionalemente en el mundo del teatro. En estos tiempos difíciles, es ahora cuando nos lanzamos a la piscina vacía. Penev es nuestro primer trabajo.
- Texto, fotografía, dirección, actor, escenografía e iluminación: Xavo Giménez
- Diseño sonoro: Lukas Lemann
- Fotografía y prensa: Iaia Cárdenas
- Ilustración: Julia Valencia
- Producción: La Teta Calva
- Distribución: a+ Soluciones Culturales.
«FROM LLOPIS TO YOU.
En este trabajo voy a hacer lo que quiera. Me ha costado quince años de profesión llegar a la conclusión de que el teatro es ni más ni menos que contar una historia. Contársela a alguien. En Llopis he encontrado la historia de mi vida. Una historia de alguien que sueña con cosas que siempre están en el sueño y que despierta en el mejor momento de la noche. No es una historia original, lo sé, pero es una historia verdadera. Y Llopis rezuma verdad, por insignificante que sea. En esta obra se sueña con llegar a Marte, con ser el hombre lobo de la luna de Valencia, con ser americano, con comer la mejor hamburguesa y beber la mejor horchata. En esta obra se añora que las flores sean para decorar las tumbas y no los hoteles. En esta obra se busca la salida del zulo en la ficción y se encuentra la verdad en el cemento que nos espera en la puerta de nuestra casa». Xavo Giménez.